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La cueva de ilusiones
Esta cueva es la entrada a un centro comercial en Tokio. Entrar en un centro comercial, en cualquier país, es encontrarse en un estado de confusión: demasiados colores, demasiados sonidos, demasiadas ofertas, que a menudo son inútiles e ilusorias. Cuando nos damos cuenta de que estamos en el centro del caos, rápidamente empezamos a buscar la salida.
En esta foto, el caos y la confusión ni siquiera se ocultan, al contrario, son parte de la atracción. Atraen a la gente, pero ¿por qué? Tal vez la gente quiere escapar del orden artificial de la vida cotidiana, lo cual es a menudo el caso en las megaciudades modernas, como Tokio.
¿Por qué buscar una ruta de escape en una ilusión? La vida sigue un orden preciso y obedece a las leyes de la naturaleza. El caos puede romper momentáneamente la rutina de una vida cotidiana que se ha vuelto artificial, pero no nos permite recuperar el verdadero orden, el sentido de la vida, la capacidad de reenfocarnos y ser plenamente conscientes de nosotros mismos.
Estas cuevas son sólo una nueva versión de los paraísos artificiales. Parecen ser menos peligrosas, y por eso son mucho más traicioneras. Para escapar de ellas, todos necesitamos un toque de Arte y Filosofía.
